Hoy el dragón y el humano me han cedido este espacio.
Para Julian Enrique:
A mi hermano.
A quien tengo mi corazón atado.
A quien siempre ha estado a mi lado.
A quien estoy unido más allá de un genético lazo.
Eres mi ejemplo.
De cómo vivir el momento.
De jugar sin pensar en el tiempo.
De reir y que las horas pasen corriendo.
Mi amigo más querido.
Tu compañía siempre he sentido.
Tus palabras las escucho en mi oido.
Tus recuerdos están a diario conmigo.
Te extraño.
Y no importa cuánto.
Y no hay afan de encontrarnos.
Y no me preocupo por estar lejanos.
Porque sea donde sea,
momento a momento,
abrazo tras abrazo,
eres y seguirás siendo mi amado hermano.
Jorge Augusto
15 de diciembre de 2012